Sesión de Postboda en Gran Canaria.
Hay personas que solo con verlas entiendes que la vida tenía que unirlas de alguna manera. Nerea y David estaban destinados a encontrarse…
La dulzura en cada uno de sus gestos, la fuerza en sus miradas, su sencillez, naturalidad y complicidad te envuelven al instante.
Cuando además todo esto lo enmarcas en un espacio privilegiado con un paisaje imponente, es entonces cuando aparece la magia.
Estoy seguro que todo su camino estará rodeado de tanta vida y tanta paz como la que transmiten ahora.
Un auténtico lujo poder contar su historia.
David…m entran ganas d casarme otra vez para q m hagas una sesion asi… M encanta!!